Un seguro de salud en viaje es un servicio esencial para unas vacaciones lejos de casa. En muchos países, tener un seguro de salud es un requisito indispensable para ingresar. Pero aquí no estamos ocupándonos de los requisitos legales para el ingreso a un determinado país, sino de las necesidades personales familiares de los viajeros.
Fuera de nuestro país necesitamos que un seguro cubra todos los posibles gastos médicos que necesitemos. Es cierto que probablemente no utilicemos el seguro, pero si tuviéramos un inconveniente, el seguro es la diferencia entre una atención médica de calidad y una simple estabilización y entre un tratamiento completo asegurado y una deuda que demoraremos muchísimos años en pagar.
Además, no sólo se trata de la asistencia médica de emergencia: cuestiones leves de salud que pueden incomodarnos durante nuestras vacaciones podrán ser fácilmente resultas con la atención apropiada, atención que nuestro seguro de salud cubre y que pocos sistemas públicos lo hacen, ya que no se trata de emergencias o situaciones con riesgo de vida.
La logística es una parte fundamental a la hora de escoger una compañía aseguradora. Nosotros queremos que la compañía sea capaz de encontrar el mejor centro asistencia dela zona en cada lugar de donde nos encontremos, que sepa cómo involucrarse para asegurarse que seamos trasladados a esas instalaciones, que tenga la capacidad de organizar un traslado complejo que signifique varios kilómetros de distancia o hasta nuestra repatriación. Todo esto debe poder organizarlo garantizando las condiciones sanitarias requeridas para un exitoso traslado.
Como podemos ver, el seguro de salud en viaje cubre todo lo que necesitamos: desde un mínima molestia que queremos quitarnos de encima hasta una internación o una traslado complejo. Entre estos dos extremos, todas las posibilidades están cubiertas. Puede no ser agradable suponer que algo malo pueda pasarnos en nuestras vacaciones, pero no hay que ser irracionales: ocuparnos de contratar y elegir un seguro de salud es algo que podemos hacer con rapidez y con tiempo antes de nuestro viaje.
Lo podemos hacer e inmediatamente olvidarnos de todas esas desagradables eventualidades para las que contratamos el seguro: ya podemos pensar en nuestro viaje sólo en términos de itinerarios, hoteles y excursiones. Todo, siempre, con la absoluta tranquilidad de que tenemos cubierta cualquier situación indeseada.